martes, 16 de agosto de 2011

CON O SIN CANCER

Como hacen los ricos, Chávez atiende sus dolencias en el exterior mientras la clase media y los pobres estamos condenados a morir en los hospitales abandonados por su gobierno. Por mí, que se quede en Cuba y le entregue la tarjeta electrónica a Fidel Castro para que gobierne a control remoto, eso es mas honesto, considerando que el dictador cubano es quien ejerce el poder tras bastidores desde hace tiempo.

Por ahora, el TteCnel ha regresado pero la desinformación sigue siendo la regla. Quizás el propio gobierno no sabe que decir exactamente, no sabe como manejar este asunto tan espinoso como inesperado. El mismo Chávez ofrece informaciones contradictorias, por un lado dice que "estamos preparándonos para un segundo ciclo de quimioterapia". Y por otro, afirma que "no se detectó ninguna célula maligna en mi cuerpo". ¿En que quedamos?

Así las cosas, es natural tantas dudas y rumores. Muchos piensan que la enfermedad es parte de un nuevo show del TteCnel para manipular electoralmente al país. Sin embargo, en principio, hay que descartar tal posibilidad. La enfermedad de Chávez no significa ventaja alguna para el gobierno. Al contrario, en el chavismo se ha producido un serio desajuste. Aun cuando se recupere -como esperamos- el solo anuncio ha desatado una lucha por la sucesión y el control del aparato, convirtiendo al PSUV en un saco de gatos. Soterradamente se cruzan cuchillos y al mismo tiempo -unos y otros- "lanzan puentes" al campo opositor. Sienten que el barco se hunde y comienzan a pensar en como "salvarse".

La megalomanía del TteCnel y el talante autocrático del régimen, hacen que la ausencia del "El Único" sea un problema serio que -eventualmente- puede afectar la gobernabilidad e impactar aspectos cruciales como la meta de la Misión Vivienda, por ejemplo. El evidente fracaso del gobierno tiende a acentuarse. Además, la enfermedad del “líder único” produce “desajustes” que se extienden a la FAN, los aliados internacionales y otros factores de poder. Así que es absurdo pensar que Chávez va a inventarse una enfermedad y generar tal situación, en la antesala de una jornada electoral tan ruda como la que se avecina.

Si Chávez y el G2 cubano querían manipular los buenos sentimientos del venezolano, habrían desplegado otra campaña "por amor" o cualquiera que permita lograr el objetivo sin tantas complicaciones. En fin, con o sin cáncer, la oposición debe seguir con paciencia y firmeza la ruta que han trazado.

Twetter: @richcasanova